Nos referimos a trabajo infantil como un sinónimo de trabajo adolescente ya que, una persona se considera infantil cuando es menor a los 18 años, al igual que los mismos adolescentes. Ahora definiremos trabajo, este es toda actividad lícita que se preste en favor de quien tiene la facultad de dirigirla, mediante una remuneración.
El trabajo infantil es definido como toda actividad económica y/o estrategia de supervivencia, remunerada o no, realizada por niños y niñas, por debajo de la admisión al empleo o trabajo, o que no han cumplido los 18 años si se trata de trabajo peligroso. La mayoría de estos niños están sometidos a tareas riesgosas, como al trafico de drogas y prostitución y a la esclavitud. En Argentina, existe la Ley 26.390 con el nombre PROHIBICIÓN DEL TRABAJO INFANTIL Y PROTECCIÓN DEL TRABAJO ADOLESCENTE.

Este tema nos obliga a referirnos inmediatamente a los derechos de la infancia para acordar que la condición de trabajo logra que el niño o niña pierda la educación obligatoria o la protección frente a la explotación económica.
Desde nuestro punto de vista, estos niños se ven obligados a salir con el fin de aportar dinero para su hogar o para lograr su propia subsistencia. Esto ocurre ya que sus padres están pasando por una difícil situación socioeconómica. También los mismos adultos son culpables, tienen la obligación de proteger a estos niños. Estos son gobernantes que no toman medidas para que estén en la escuela y no en la calle. Los menores tienen dificultades y atrasos en las escuelas, por ende, terminan abandonando. Entonces al abandonar las escuelas, no van a tener los conocimientos básicos y seguirán en la misma situación económica. A su vez, no tendrán las herramientas para poder educar a sus hijos en un futuro. No obstante el trabajo produce graves efectos en la salud física de los niños como enfermedades crónicas, retarda el crecimiento, agotamiento físico y provoca dolores en las articulaciones y deformaciones oseas.

Como solución, pensamos que el Estado debe garantizar la educación y protección jurídicas a los niños. Para ello, es necesario coordinar las acciones de las distintas organizaciones que ya se ocupen del tema. El Estado tiene la obligación de sancionar a los adultos que aprovechen la situación de desventaja de estos niños y los emplean, abusando de su edad, pagándoles sueldos mínimos.